164 diciembre 2021 ~ Vinos Valencianos
Vinos Valencianos

Visitamos la Bodega Chozas Carrascal

Chozas Carrascal es esa bodega que, el que os escribe, lleva en su cajita de los recuerdos siempre, a  lo largo de mi corta trayectoria recorrida dentro del mundo del vino valenciano, siempre he recordado aquellas primeras visitas junto a sus anfitriones Julián López y Mariajosé Peydró, dónde se les notaba su pasión y gran ilusión por el proyecto.

Han pasado algunos años ya desde la primera vez que los conocí y la bodega ha cambiado mucho, han habido ampliaciones, nuevos vinos, nueva gerencia, nuevo enólogo, etc., pero el espíritu, la ilusión y una perfecta armonía del conjunto y el terruño han dado lugar a una plena consolidación de la bodega y la entrada de una nueva generación que sigue creyendo e ilusionando a los que conocemos la bodega.


 Volvimos a visitarla, esta vez no coincidimos con sus propietarios, pero aún así volvimos a sentir y experimentar esa ilusión y calidez que ellos siempre han demostrado en las ocasiones dónde si hemos coincidido.

La bodega en si está pensada para que, a la vez que se elaboran vinos y todo su viñedo alrededor nutre a la misma, te sientas cómodo y disfrutes de un gran gsuto por las cosas, detalles pequeños y otros no tanto, te hacen sentir que vuelves a casa, que los crudos inviernos no lo son tantos por la calurosa acogida de su personal, de su arquitectura, de las obras de arte que te acompañan durante la visita y sobre todo de lo cuidado y esmerados detalles que el visitante va encontrando durante la misma.

Si hablamos de los vinos, esta bodega, considerada una de los 19 Pagos Vinícolas españoles, cuida y mima sus vinos, desde los más sencillos, hasta los nuevos vinos de la segunda generación de la bodega y que ya son un referente de muchas cartas de restaurantes y establecimientos especializados.

Magníficos son los dos cavas que la bodega elabora, una producción limitada con un carácter muy personal, no puedo compararlos con otros, porque son propios, impregnados del terruño y saber hacer de la casa que los hace únicos.


Julián y Mariajosé os eché de menos en esta visita y se que tendré que volver a visitaros, no porque mi nivel de satisfacción o expectativa quedara por debajo, sinó porque siempre es un placer escucharos y empaparme de vuestra ilusión y conocimientos.